
Daniel Hecker
12 oct. 2022
El hormigón puede fallar de muchas maneras y por distintas razones. Afortunadamente, hay más de una manera de saber la causa. Este entendimiento permite que se tomen las medidas más apropiadas para reparar y/o reemplazar.
Principales causas en la aparición de grietas
Tomando en cuenta si son problemas superficiales, de cierta profundidad o que podrían comprometer la integrad de la estructura, las razones que afectan al hormigón suelen ser muy variadas en naturaleza y complejidad.
Cuando agrupamos las más habituales, podemos resumirlas así:
- Deterioro causado por condiciones marinas y la exposición a reacciones químicas.
- Afectación producto de fenómenos como terremotos, huracanes, inundaciones, incendios y más.
- Daños como consecuencia de meteorización, erosión, humedad, impactos, desgaste, entre otros.
- Desplazamiento o fractura generado por tensiones térmicas, asentamiento, retracción, sobrecargas, etc.
- Deficiencias estructurales provocadas por mal cálculo de las cargas, corrosión de los elementos, así como por errores en el diseño y detallado.
- Fallas arquitectónicas generadas por una construcción deficiente, la utilización de materiales inadecuados y descuido significativo asociado a la supervisión y el control de calidad.
Es importante acotar que los defectos en el cemento requieren de una correcta evaluación y diagnóstico sobre la extensión del daño. Una vez establecida la causa, las reparaciones deben estar acompañadas de una investigación exhaustiva debido a que los trabajos podrían afectar la resistencia o rigidez de la estructura.
Métodos para la reparación de fisuras en concreto
Dependiendo de la naturaleza de la afectación, la reforma o restauración puede ser superficial (cosmética) o podría requerir la sustitución de toda o parte de la estructura. En este sentido, las técnicas de reparación están agrupadas en 3 grandes grupos:
- Procedimientos externos poco profundos.
- Remoción o reemplazo del material o la parte que presenta algún daño.
- Aplicación mediante inyección para cavidades, grietas y zonas que asemejan un panal de abeja.
Resinas epóxicas
Cuando se añade arena gruesa o bauxita calcinada, se obtiene un mortero de resina que reacciona al endurecedor una vez que se mezclan. La reacción puede durar de 30 a 60 min y son muy resistentes a los agentes químicos. Esto se combina con características como: gran fuerza, mucha adherencia y también es a prueba de agua.
Cemento, lechadas y morteros
Usando maquinaria de construcción como hormigoneras o mezcladores de cemento, se puede crear una mezcla a base de concreto para reparar zonas agrietadas o dañadas. Otra opción efectiva es la mezcla en seco rica en cemento para las fisuras. Y si el tamaño de la superficie es de grandes dimensiones, puede usarse hormigón proyectado con o sin encofrados metálicos.
Compuestos de hormigón polimérico
Ideales para reparar fallas estructurales del cemento común, se pueden aplicar en forma de capas o mediante infiltración. Existen 3 tipos principales: los de impregnación, hormigón polímero y hormigón polimérico modificado. Son excelentes para defectos debido a sus propiedades de adherencia, resistencia química, aguante contra el desgaste, baja absorción de agua y aplicación por efecto de corrosión.
Otras soluciones disponibles
Además de lo mencionado, existen una gran variedad de productos diseñados para fortalecer, impermeabilizar y evitar reacciones químicas perjudiciales, como por ejemplo:
- Pinturas epóxicas.
- Tratamiento con tetrafluoruro de silicio.
- Esmaltes a base de neopreno y caucho clorado.
- Aceites de secado como semillas de linaza o de Tung.
- Fluoruro de cinc, silicato de sodio o magnesio.
Aunque existen más opciones, esperamos que estas soluciones puedan servir de guía al momento de tratar deterioros como grietas, fisuras o fallas estructurales. Como expertos en maquinaria de construcción, conocemos bien estas circunstancias y queremos proporcionar soluciones concretas, prácticas y eficientes.
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